Los continuos procesos de formación que la Dirección Técnica de Fundación Tierra de Esperanza está ejecutando para fortalecer el trabajo directo con los niños, niñas, adolescentes y familias, orientó una nueva capacitación a la gestión de redes como una aliada en los procesos de intervención.

El curso denominado Intervención y práctica de redes. Herramientas para el abordaje del contexto en el trabajo con infancia y adolescencia fue impartido a la línea de Protección de Derechos, a las modalidades PIE (Programa de Intervención Especializada), PIE-24 horas y PPF (Programa de Prevención Focalizada) y fue impartido por Jaime Muñoz Vidal, supervisor técnico en Fundación Tierra de Esperanza.

El profesional destacó que la importancia de profundizar en este ámbito obedece a que  en gran medida, la génesis y mantención de las dificultades psicosociales se asocian a elementos de riesgo del contexto más próximo a la vida de los niños, niñas, adolescentes y sus familias, así como también al ámbito sociocomunitario e institucional en el cual transcurre su vida, es por esto que es clave incluir estos entornos en la intervención identificando en cada uno de ellos, los recursos y aspectos positivos que puedan contribuir a la inclusión sociocomunitaria efectiva y prosocial, así como al resguardo y protección de los derechos de los niños, niñas y adolescentes”.

Además, Muñoz Vidal agregó que en términos prácticos para los equipos de los proyectos  “es relevante en función de cubrir variadas necesidades de acceso vinculadas con el mundo interinstitucional, tales como salud, educación, cultura, recreación saludable. A nivel familiar, acceso a vivienda, trabajo, capacitación, abordaje de la violencia de género, acceso a beneficios sociales, entre otros. Por otro lado, en un plano de redes más cercano al caso, considerando a las personas cercanas protectoras y no protectoras y las redes a nivel comunitario, entendidas como espacios de participación formales e informales en los que las personas se incluyen, la utilidad pasa por favorecer procesos de vinculación social positiva, que potencie los recursos de la familia y los NNA a través de relaciones saludables y de apoyo social con actores que constituyen co-garantes de derechos, así como el problematizar y favorecer procesos de desenganche de vínculos o relaciones que constituyan riesgos para el bienestar y el adecuado desarrollo de los NNA y sus familias. En todos estos procesos, el curso que se está desarrollando con los equipos de PPF, PIE y PIE-24 horas contribuye con una comprensión teórica común, basada en el enfoque de redes y un conjunto de herramientas, procedimientos y técnicas concretas para el abordaje del contexto en la intervención”.

La planificación anual de capacitaciones continuará realizándose en los próximos meses en las distintas líneas de Fundación Tierra de Esperanza.