Más de 500 familias que participan en distintos programas de Fundación Tierra de Esperanza han sido beneficiadas por el proyecto Locales Conectados, iniciativa creada por Fundación Urbanismo Social y que en alianza con otros organismos públicos y privados, como Fundación Colunga y el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, ha permitido ayudar a personas de todo el país.
Se trata de un proyecto que conecta a las familias que pertenecen al 40% más vulnerable del Registro Social de Hogares con los almacenes de sus barrios y adheridos a la red Locales Conectados, permitiéndoles comprar con un bono de 70 mil pesos y en un plazo de seis meses sus alimentos. Lo anterior, ha beneficiado a familias con niños, niñas y adolescentes que reciben atención en Fundación Tierra de Esperanza, de los programas ambulatorios subvencionados por Mejor Niñez y Sename , exceptuando a los que funcionan en los centros de internación provisoria y régimen cerrado.
Actualmente, se abrió la segunda etapa que permitirá beneficiar a 426 nuevas familias, siendo un aporte a la economía de los hogares afectados por los efectos de la pandemia y un apoyo al comercio minorista de los barrios con la activación de las ventas de alimentos e insumos básicos.
Al respecto, José Rebolledo, coordinador técnico de la línea de Educación en Fundación Tierra de Esperanza, señaló que la iniciativa apunta a mitigar los factores de riesgo de inseguridad alimentaria y nutricional: “siempre en situaciones de crisis, la población más afectada es aquella que vive en condiciones de mayor vulnerabilidad ya que difícilmente puede, con los recursos que posee, enfrentar adecuadamente las consecuencias de estos procesos y se encuentran en mayor desventaja para superar los efectos de los mismos. Esto es precisamente lo que ha sucedido para un número muy importante de familias de niños, niñas y adolescentes que participan de los proyectos y programas ejecutados por Fundación Tierra de Esperanza. La crisis sanitaria que ha vivido el país durante los dos últimos años y las consecuencias económicas de la misma han golpeado duramente a estas familias, restringiendo el acceso al trabajo y a los bienes básicos de consumo que aseguren una adecuada subsistencia, por ello cualquier iniciativa que vaya en directo apoyo de estas familias, y en especial, si este apoyo es de índole económico, permitirá mejorar las condiciones de acceso a la alimentación y subsistencia del hogar”, indicó Rebolledo .
En tanto, Karina Ferrada, profesora del programa de Apoyo Socioeducativo de Fundación Tierra de Esperanza en Puerto Montt, señaló que “Locales Conectados ha sido una gran iniciativa (…) beneficiamos a dos usuarios. Conociendo la realidad económica de ellos y en general de todos los y las jóvenes que participan del programa, creemos que es un gran aporte. Actualmente la posibilidad de postular a nuestros jóvenes aumentó considerablemente. Las familias ya beneficiadas se mostraron muy agradecidas. Personalmente creo que iniciativas como estas alivian la economía del hogar que los recibe”, afirmó Ferrada.